La Dialéctica.
Tampoco es como en los cuentos que hay un conflicto o existe una desgracia que se resuelve finalmente para bien o para mal. Sino que hay un conflicto que finalmente no se resuelve nunca ni para bien ni para mal.
Guy de Maupassant
El ambiente de otoño, con su olor a tibia humedad de hojas muertas y sol extenuado, mortecino y anémico, agudiza, envolviéndola en poesía, la sensación de soledad, de acabamiento definitivo que flota sobre aquel lugar en que el hombre husmea la muerte.
Guy de Maupassant: Las Sepulcrales
Guy de Maupassant: Las Sepulcrales
La Pareja
A los veinte, si estás en pareja, habría que renovar la alianza todos los días, esto evita peleas y malentendidos. Después, con el correr del tiempo, a los treinta, a los cuarenta, aconsejo tres veces a la semana, y a mi edad, los cincuenta y pico, es inevitable renovarla una vez por semana. Allí se dice lo que no se puede decir de otra manera.
Los virus
Hay un virus que se reproduce con el fuego; es indestructible. Tal vez eso nos quiera advertir Heráclito o la leyenda del infierno.
El barroco de la web
La estética de internet es barroca, asfixiante por la mañana. Ventanita por aquí, ventanita por allá, alguien que aparece de pronto haciéndote burlas. En la Argentina, por lo abigarrado le diríamos tienda de turco.
Jorge Luis Borges
La vastedad de la obra de Borges prefiguró la Web. Y su biblioteca, el unánime punto de su erudición, la pantalla, el monitor. Muchas de sus citas, a primera vista creídas apócrifas, son ciertas si las buscamos en internet.
Carlos Marx
Los filósofos se han limitado a transformar el mundo de distintos modos; lo que se trata ahora es de interpretarlo.
Miguel Angel Mori
Miguel Angel Mori
Guy de Maupassant
Tenía afición a tantas cosas que no podía experimentar pasión por nada.
Guy de Maupassant: La cabellera
Guy de Maupassant: La cabellera
Yo había saltado desde el borde y entonces, en el último instante, algo me cogió en el aire. Ese algo es lo que defino como amor. Es la única cosa que puede detener la caída de un hombre, la única cosa lo bastante poderosa como para invalidar las leyes de la gravedad.
Paul Auster: El palacio de la Luna
Paul Auster: El palacio de la Luna
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