Extraterrestres
Pero claro -pensé mirando esa película que habla de implantes alienígenas en cuerpos humanos con el fin de colonizarnos- para nuestra cultura predominante, la cristiana, somos todos alienígenas. Entonces ¿porque me resulta fantasiosa o alocada esa idea?
El inglés y la sabiduría.
club
adj. relativo a una asociación o club
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s. club, agrupación, asociación, centro, confraternidad, hermandad, mancomunidad; garrote, cachiporra, cipote, macana, marillo, maza, palo, palo pesado y corto, lugar de reunión habitual
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v. dar garrotazos, aporrear, dar bastonazos, garrotear; formar un club, formar un grupo, hacer un club
adj. relativo a una asociación o club
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s. club, agrupación, asociación, centro, confraternidad, hermandad, mancomunidad; garrote, cachiporra, cipote, macana, marillo, maza, palo, palo pesado y corto, lugar de reunión habitual
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v. dar garrotazos, aporrear, dar bastonazos, garrotear; formar un club, formar un grupo, hacer un club
La Novela
La villa o la ciudad de Superman, el personaje de historieta, escondida bajo un fanal en una cueva, es el símil de la ciudad del escritor en sus novelas.
Así se escribe.
Un viejo amigo de todos, el señor Bonifacio, gran cazador de alimañas y gran bebedor de vino, un hombre robusto y alegre, lleno de gracia, de buen sentido y de filosofía, de una filosofía irónica y resignada, que se manifiesta por agudezas mordaces y nunca por tristes reflexiones, dijo de pronto:
Guy de Maupassant: El Guardia (La Garde)
Guy de Maupassant: El Guardia (La Garde)
Crítica a la Razón.
En resumen, somos unos animales mamíferos que se han especializado en procesos de abstracción de la realidad, en pequeños cubos geométricos, en derivados de las matemáticas y que pretenden construir un mundo a su imagen y semejanza. Vemos al mundo divido en dos, y después, más y más dividido, hasta la eternidad, -esa son las paredes de la lógica, la división arbitraria-. Esa capacidad de desarmar el mundo en mil pedazos y la imposibilidad de reconstruirlo, les hace creer en una “verdad” que estaría en la ordenación de las esquirlas, como si fuera un jarrón que lo hubiera roto en mil pedazos e intentaran reconstruirlo con las fisuras y falta de gracia resultante. No dándose cuenta, primero, que la propia palabra verdad es otra esquirla que deriva de la separación del sujeto, del objeto. En fin no nos damos cuenta que al pensar anulamos toda posibilidad de llegar a la verdad.
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